PUERTA DE HIERRO, RETOMA EL CAMINO DEL TRIUNFO
Por: José Guillermo Cardona “Cauchito”
El toro es el rey de la fiesta y siempre lo será, su majestad el toro de lidia. Ese que te quita y te pone, el único que te da el lugar y el que decide que va a ser de un torero. Los hay de todas las pintas, castas y fenotipos; vacios o llenos por dentro. Por eso, feria sin toros no es feria.
Hoy en la segunda, Novillada sin picadores Pre-feria de la Escuela de Tauromaquia de Cali, el rey hizo presencia, en todo el sentido de la palabra, Don Eduardo Estela, trajo un encierro muy bonito, serio y de muy buen comportamiento en general, que se fue para el desolladero con muchas orejas.
El primero, santacolomeño, llevaba por nombre “Lanzador”, mostró su sangre y su encaste, con calidad y temperamento: bravo. Le tocó en sorteo a, Carlos Lárraga, aquel joven ecuatoriano que llegó de intercambio a la Escuela de la ciudad, mostró actitud y ganas.
Quitó por gaoneras y se fue por la muleta; tomó la montera y pidió permiso a Usía; brindó al, Dr. Ernesto González, en muestra de su agradecimiento con el Director de la Escuela, la cual lo acogió como uno más, en esta, una de las paradas en el difícil mundo de ser torero. El novillo le pidió carné y lo apretó por momentos, muestra de que es un torero en formación (por eso torean novillos sin caballos) y que era un toro con su temperamento. Bajonazo y varios descabellos. La gente aplaudió su disposición.
En segundo turno, salió el toro # 426, “Marinero” –todavía recuerdo como hacía el avión- éste quería ser capitán. Andrés Valencia, novillero payanés, mostró grandes progresos: recordemos que todos estos jóvenes torean muy poco y sólo toreando se coge sitio, estuvo bien, pausado y mucho más calmado. Desde el principio vio las bondades del toro.
Comenzó su faena con un toreo variado de capote: recibió al toro por verónicas y quitó por tafalleras. Para pasar por su muleta y brindar al público. Se fue por estatuarios al medio del redondel, el toro que fue el mejor de la tarde, embestía con alegría y nobleza. Valencia, quien lo entendió muy bien se dio cuenta enseguida que tenía en sus manos el novillo esperado. Por el pitón izquierdo ejecutó unos naturales de gran factura, que hicieron tronar las palmas de los aficionados que estaban en la monumental de, “Cañaveralejo”, al tiempo que sonaba la música.
Al entrar a matar comenzaron los pedidos de indulto para el toro, que arrastro el hocico por toda la arena del albero. Andrés, se dispuso a matar y dejó media estocada para rectificar con tres cuartos, bien puesta.
El público pidió la oreja, al igual, que la vuelta al ruedo para el toro –quien la merecía en realidad, porque fue muy bueno, bravo, con transmisión y alegría en sus embestidas.
Randy Rojas, que venía de cortar una oreja en Quito, debía exprimir a “Limonero”, # 400, el cual salió desenterado, pero le permitió ejecutar con gran emoción el tercio de banderillas, al mismo novillero. El toro, aprendió rápido y tuvo mucho genio, de todas formas, Rojas, le puso ganas, pero no hubo transmisión en la faena muleteril. Mata de pinchazo y certera estocada. Silenciados ambos.
Carlos Lárraga, tenía su último toro en Cali y así salió, a jugársela y con el “Generalito”, que le correspondía, # 415, novillo que le ayudó hasta que ya no pudo más, éste fue noble y pronto. Toreó bien con el capote y con la muleta, la plaza se entregó al quiteño - claro está entendiendo que están en sus inicios. Realizó una faena de cercanías y larga, bajo las notas de los pasodobles. De nuevo falló con la espada y todo quedó en una vuelta al ruedo.
Andrés Valencia, salió decidido y en verdad fue a por todas, cogió el capote y se calzó la montera, se amarró los machos y echo pa´lante. Recibió a Porta Gayola a, “Palmero” y en los medios se quedó para ejecutar un afarolado de rodillas, se puso de pie y por verónicas.
El novillo fue un poco bronco en sus embestidas y no era tonto. El novillero decidido hizo lo que más pudo y en un momento pasó un susto grande al verse arrollado por el animal. Se paró de nuevo y en las tablas terminó la faena con media y estocada entera, mal ejecutadas, cosa que deberá aprender con la práctica y el entrar a matar muchos novillos. Reclamó la oreja que el público le pidió fuertemente.
Cerró la última novillada sin picadores, “Campeador” un hermoso ejemplar, sardo y buen mozo, que embistió con calidad como varios de sus hermanos. Randy Rojas, salió a arrear, no se quería dejar ganar y asi lo intentó. Estuvo dispuesto en banderillas y con la muleta ligó unas buenas tandas con la mano derecha que le permitieron el honor de la música, pero con la espada se quedó todo: un espadazo pero el toro no cayó; pidió la cruceta, con la que falló repetidas veces. Palmas para ambos.
Se comentaba en la tertulia de remate, que los novillos fueron desperdiciados por los continuos errores de los novilleros con la espada y en muchos momentos de colocación.
Así se cierran los dos festejos sin caballos y quedamos a la espera de las novilladas con caballos, que darán inicio el 4 de diciembre; Novillos de Salento, de la familia González Rincón, para David Martínez (Bogotá), Santiago Gómez (Ex Alumno Escuela de Cali) y Juan Manuel Noreña (Escuela De Cali). Ahí nos vemos.
FICHA DEL FESTEJO
Cali (Colombia): Plaza de toros Monumental de “Cañaveralejo”. Un poco más de ¾ de aforo. 2ª novillada sin picadores, del ciclo internacional Preferia. Novillos de, Puerta de Hierro: muy bien presentados y de gran juego en general, destacados: 2º,4º y 6º, bravo y con genio el 1º. Para los novilleros: Carlos Lárraga, (Ecuador); de malva y oro, palmas y vuelta al ruedo tras aviso, Andrés Valencia; con vestido, palo de rosa y oro, palmas y oreja, Randy Rojas; con traje, blanco y oro, silencio y palmas.
Destacada actuación en banderillas del subalterno, Ricardo Santana. Bien en la brega, Alex Benavides y James Peña.
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